Uno de los paisajes más hermosos y escarpados de Turquía está en la región de Capadocia. Ubicada en la histórica región de Anatolia Central, Capadocia, nombre que antiguamente significaba «tierra de hermosos caballos», está a 90 minutos de vuelo desde Estambul.
Casas cueva prehistóricas excavadas en las montañas, paseos en globo aerostático, iglesias medievales con frescos intactos y pintados, impresionantes cadenas montañosas en tonos blancos, rojos, rosas y verdes, ciudades subterráneas, y mucho más, hacen de Capadocia un destino inolvidable.
Es por eso que hoy, te invitamos a conocer cinco cosas que no puedes dejar de hacer en tu viaje a Capadocia.
1. Dé un paseo en globo por la Capadocia
Con sólo mirar al cielo cuando esté en Capadocia, verá decenas de coloridos globos aerostáticos flotando en la distancia. El vuelo en globo es la mejor y más mágica manera de experimentar los espectaculares paisajes de la zona.
El vuelo estándar tiene una duración de 60 minutos, con una capacidad de hasta 20 personas en una cesta y ofrece una copa de champán de cortesía al aterrizar. El coste es inferior a 150 euros por persona.
El siguiente nivel es el paquete Deluxe, que es igual que el Standard, excepto que es de 90 minutos y la cesta tiene capacidad para un máximo de 12 a 16 personas. El coste es inferior a 250 euros por persona.
El programa Especial incluye las mismas comodidades que las otras dos opciones, pero es casi privado, con cestas que sólo llevan de dos a cuatro personas. Todos los paseos incluyen un traslado de ida y vuelta a su hotel.
2. Visite el Museo al Aire Libre de Goreme
El Parque Nacional de Göreme fue uno de los primeros lugares de la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO designados en Turquía. Cerca de allí, al este de la ciudad, el Museo al Aire Libre de Goreme es un complejo de monasterios e iglesias rupestres excavadas en la roca volcánica de los siglos X, XI y XII.
Un corto paseo desde las principales atracciones del parque te lleva a la Iglesia de Buckle, que tiene cuatro cámaras que albergan la Iglesia Vieja con sus representaciones de la Biblia en pintura roja y verde brillante, y la Iglesia Nueva, que tiene pinturas en añil de la vida de Cristo con gran detalle.
3. Ir al subsuelo
Hay 36 ciudades subterráneas en Capadocia, y contienen tanta historia y fascinación como las montañas y estructuras de la superficie.
Algunas de las ciudades subterráneas más conocidas de la región de Capadocia son la ciudad subterránea de Derinkuyu, la de Ozkonak, la ciudad del pueblo de Mazi, la de Gaziemir y la ciudad subterránea de Kaymakli.
4. Hacer recorridos a pie o senderismo
Andromeda Tours, una empresa turística galardonada, ofrece excursiones de un día por toda Capadocia y Turquía. El Tour Rojo, una excursión de un día completo con recogida y regreso a su hotel, explora la parte norte de la zona, incluida la ciudad de Goreme.
La excursión incluye una visita al Museo al Aire Libre de Goreme y al Valle de los Monjes. La zona es famosa por sus «chimeneas de hadas», que son formaciones rocosas geológicas con cimas en forma de hongo.
A continuación, pase por un taller de cerámica y una fábrica donde podrá ver a un alfarero en su torno, haciendo cerámica a mano. La excursión termina con una visita al castillo de Uchisar, que cuenta con una serie de habitaciones huecas en formaciones rocosas elevadas con escaleras, pasadizos y túneles de piedra.
El castillo de Uchisar es el punto más alto de Capadocia y tiene unas vistas sensacionales. El almuerzo en una auténtica taberna turca está incluido.
5. Pruebe las exquisiteces locales
El Reserved Restaurant & Lounge de Uçhisar es una agradable desviación de los numerosos restaurantes turcos de la zona con comida e interiores tradicionales.
El interior contemporáneo de este restaurante de Capadocia está bellamente decorado con sillas de terciopelo azul marino, suelos de mármol cremoso, tableros de madera petrificada y paredes de roca cincelada.
Por otro lado, el Ziggy Café se encuentra en una casa de piedra restaurada que tiene tres terrazas exteriores con vistas al pintoresco pueblo de montaña de Urgup. El interior es acogedor, con sillones y chimeneas.
Las especialidades del menú son el borek, un pastel de hojaldre relleno de queso, espinacas y/o carne, y el pastirma, una versión curada del pastrami preparada con ajo, semillas de alholva, pimentón y sal.
Yuniet Blanco Salas